jueves, 10 de septiembre de 2015

Tema N° 5: "SER CRISTIANO EN EL MUNDO ACTUAL Y EN LA FAMILIA"


 
"Le anunciaron la Palabra del Señor a él y a todos los de su casa"
                                                            (Hcho 17, 32 )
 
PREAMBULO
 

¿QUIÉN ES EL VERDADERO CRISTIANO?


Jesús enseñando
Un verdadero Cristiano es una persona que ha puesto su fe y confianza en la persona de Jesucristo, que reconoce que Él murió en la cruz como pago por todos los pecados personales de cada uno de nosotros y que resucitó al tercer día para obtener la victoria sobre la muerte, para dar la vida eterna a todos los que creamos en Él.
            Un verdadero cristiano es en verdad un hijo de Dios, una parte de la verdadera familia de Dios, y uno a quien le ha sido dado una nueva vida en Cristo. Por lo tanto Dios pone un deseo en el corazón del cristiano de cambiar totalmente su estilo de vida y le incentiva a llevar una vida santa y pura. La marca de un cristiano verdadero es demostrar amor hacia los demás y la obediencia a la Palabra de Dios.
            Además el cristiano, como cualquier ser humano, ha de estar dispuesto a conocer y cumplir los mandamientos de la Ley de Dios y de la Iglesia.  
            Por otro lado, un cristiano debe conocer, celebrar y recibir los sacramentos que alimenta, fortalece y purifica la vida de fe.
            Finalmente, el cristiano debe orar. Hablar con Dios, tratarlo nos hace más sus amigos. El Señor ya lo había dicho: ustedes son mis amigos. El que ora con Dios está protegido y el demonio con sus tentaciones no podrán prevalecer.
 
SER CRISTIANO EN EL MUNDO ACTUAL


Importancia de la oración
¿Qué significa seguir a Cristo, hoy? Se trata de un cambio interior de la existencia. Exige que ya no me cierre en mi yo, considerando mi autorrealización como la razón principal de mi vida... Se trata de la decisión fundamental de dejar de considerar la utilidad, la ganancia, la carrera y el éxito como el objetivo último de mi vida, para reconocer sin embargo como criterios auténticos la verdad y el amor. Se trata de optar entre vivir sólo para mí o entregarme a lo más grande. Hay que tener en cuenta que verdad y amor no son valores abstractos; en Jesucristo se han convertido en una Persona. Al seguirle a Él, me pongo al servicio de la verdad y del amor. Al perderme, vuelvo a encontrarme.
            Desde un punto más 'estricto' un cristiano es alguien que ha nacido de nuevo (nacido del Espíritu Santo) y que es un hijo de Dios. Es miembro de la familia de Dios. Es miembro del cuerpo de Cristo, la Iglesia, dentro de la cual ha sido bautizado por el Espíritu Santo. Es y desea ser miembro activo de una congregación local donde funciona junto con otros cristianos para el fortalecimiento y la edificación del cuerpo de Cristo.
Ser cristiano no es simplemente…
  • Hacer el bien y evitar el mal. Hay muchas personas honestas, que trabajan por construir un mundo mejor e intentan luchar contra la corrupción y la injusticia. Les mueven motivos nobles y una ética humanística. Sin embargo, a pesar de sus aportes positivos y sus valores humanos, no por esto pueden ser llamados propiamente cristianos.
  • Creer en Dios. Judíos y mahometanos, budistas e hindúes, y miembros de otras grandes religiones de la humanidad, creen en Dios, origen y fin último de todo, pero no creen en Jesucristo. Por más que sus vidas y esfuerzos estén bajo el amor providente de Dios y la fuerza de su Espíritu, no pueden ser llamados cristianos.
  • Cumplir unos ritos determinados. Toda religión posee ceremonias y ritos simbólicos, pues de lo contrario se convertiría en un mero intelectualismo ético para minorías. Pero no basta haber sido bautizado, haber hecho la primera comunión, asistir a procesiones, peregrinar a santuarios marianos, celebrar festividades para poder ser identificado como cristiano. Los fariseos del tiempo de Jesús eran muy fieles en sus ritos y sin embargo Jesús los denunció cómo hipócritas. El rito es necesario, pero no suficiente para ser cristiano.
  • No se limita a aceptar unas verdades de fe, en unos dogmas, recitar el Credo o saberse el catecismo de memoria. Muchos que profesan la doctrina cristiana recta, están en la práctica muy lejos del Evangelio. Es necesario aceptar la fe de la Iglesia, conocer sus leyes y preceptos, pero esto no basta para ser cristiano. El cristianismo no es sólo una doctrina.
  • No se identifica con seguir una tradición, que se mantiene de siglos a través de un ambiente. Toda religión reconoce la importancia del peso de la historia, pero el cristianismo no es simplemente una cultura, un folklore, un arte, una costumbre inmemorial que se transmite a través de los años.
  • No puede consistir únicamente en prepararse para la otra vida, esperar en el más allá, mientras uno se desinteresa de las cosas del presente o se limita a sufrirlas con resignación. La fe cristiana afirma la existencia de una vida eterna y la consumación de la tierra pero la esperanza de una tierra nueva no debe amortiguar la preocupación por transformar y cambiar esta historia. Por esto no se puede llamar cristiano a quien se inhibe de las preocupaciones históricas, con la excusa del cielo futuro.
  • No se identifica con ninguna de estas posturas u otras semejantes. Algunas son previas al cristianismo (hacer el bien, creer en Dios), otras admiten elementos necesarios pero no suficientes (practicar ritos, aceptar verdades), otras son mutilaciones del cristianismo (reducirlo a una tradición o a la espera de los bienes eternos). Seguramente la contradicción del cristianismo de América Latina nace de que muchos cristianos se identifican con algunas de estas formas inadecuadas de cristianismo. El resurgir de la Iglesia latinoamericana está ligado a una visión más auténtica del ser cristiano.  
¡SER CRISTIANO ES SEGUIR A JESUS!
            No se puede ser cristiano al margen de la figura histórica de Jesús de Nazaret, que murió y resucitó por nosotros y Dios Padre le hizo Señor y Cristo (Hch 2,36). Lo cristiano no es simplemente una doctrina, una ética, un rito o una tradición religiosa, sino que cristiano es todo lo que dice relación con la persona de Jesucristo. Sin él no hay cristianismo. Lo cristiano es El mismo. Los cristianos son seguidores de Jesús, sus discípulos. En Antioquía, por primera vez los discípulos de Jesús fueron llamados cristianos (Hch 11,26).
            La vida cristiana es un camino (Hch 9,2), el camino de seguimiento de Jesús. Los Apóstoles, primeros seguidores de Jesús, son el modelo de la vida cristiana. Ser cristiano es imitar a los Apóstoles en el seguimiento de Jesús. De los Apóstoles se dice que siguieron a Jesús. (Lc 5,11) y a este seguimiento es llamado todo bautizado en la Iglesia. Los Apóstoles no fueron únicamente los discípulos fieles del Maestro, que aprendieron sus enseñanzas, como los jóvenes de hoy aprenden de sus profesores. Ser discípulo de Jesús comportaba para los Apóstoles estar con él, entrar en su comunidad, participar de su misión y de su mismo destino (Mc 3,13-14; 10, 38-39). Seguir a Jesús hoy no significa imitar mecánicamente sus gestos, sino continuar su camino "pro-seguir su obra, per-seguir su causa, con-seguir su plenitud" (L. Boff). El cristiano es el que ha escuchado, como los discípulos de Jesús, su voz que le dice: "Sígueme" (Jn 1,39-44; 21,22) y se pone en camino para seguirle.

¿Qué supone seguir a Jesús, entonces...?

Seguir a Jesús supone reconocerlo como Señor.
            Nadie sigue a alguien sin motivos. El cristiano no sigue, pues a cualquiera, sino al Señor de quien parte la iniciativa para que le sigamos. El es quien siempre llama y nos dice a cada uno de nosotros "Sígueme". El llamado viene de El, a través de la Escritura, de la Iglesia o de los acontecimientos de la historia. Ante esta vocación el cristiano exclama como Pedro: ¿"Señor a quién iríamos"? Tú tienes palabras de vida eterna. Nosotros creemos y sabemos que tú eres el Santo Dios " (Jn 6,68).
            La fe cristiana no consiste propiamente en aceptar doctrinas, sino en reconocer a Jesús como Señor y seguirle.

Seguir a Jesús significa aceptar su proyecto
            Jesús tiene un proyecto, una misión: anunciar y realizar el Reino de Dios (Mc 1,15). Este es el plan que el Padre le ha encomendado, formar una gran familia de hijos y hermanos, un hogar, una humanidad nueva, los nuevos cielos y la nueva tierra que los profetas habían predicho (Is 65, 17-25).
            El Reino del Padre, el cumplimiento de su voluntad, un mundo donde haya pan y perdón, liberado de todo mal y victorioso de toda tentación.
Seguir a Jesús es formar parte de su comunidad
            Jesús aunque llamó a los discípulos personalmente, uno por uno, a su seguimiento, formó con ellos un grupo, los doce, a los que luego se añadieron hombres y mujeres hasta constituir una comunidad: la comunidad de Jesús (Lc 8,1-3). Este modo de actuar del Señor no es casual, sino que corresponde al plan de Dios de formar un pueblo, a lo largo de la historia, para que fuese semilla y fermento del Reino de Dios.
Seguir a Jesús es vivir bajo la fuerza del Espíritu
            Seguir a Jesús, formar parte de su comunidad, continuar su proyecto en la historia de hoy, son realidades que nos superan. Por esto Jesús prometió el Espíritu a sus discípulos (Jn 14, l7) y este Espíritu es la fuerza y el aliento vital que anima, vivifica, guía, santifica, enriquece y lleva a su plenitud la comunidad de los seguidores de Jesús.
 
Podríamos resumir todo lo dicho sobre el seguimiento de Jesús en estos diez mandamientos del Dios de la Vida:
1. Creerás que Dios es el Dios de la Vida, que desea la vida en abundancia para todos y no la muerte.
2. No utilizarás el nombre del Dios de la Vida, para atentar contra la vida de nadie.
3. Agradecerás a Dios la vida y la celebrarás como un gran don y una tarea.
4. Defenderás la vida amenazada y honrarás a los que te han dado vida.
5. No matarás de ningún modo la vida, pues la vida es de Dios.
6. Amarás y gozarás la vida sin egoísmos.
7. No te apropiarás de los bienes que han sido creados para que todos vivan.
8. Compartirás la vida con tu pueblo con toda verdad.
9. Trabajarás para que todos tengan lo suficiente para vivir.
10. Pondrás tu vida al servicio de los demás, hasta arriesgar tu vida por la vida de los otros.
Estos diez mandamientos se resumen en dos: Amarás tu vida y la vida de tu pueblo como vida de Dios.
 
EL CRISTIANO Y LA FAMILIA
 
La familia cristiana
La familia, es una comunidad de fe, esperanza y caridad. Por eso le podemos llamar Iglesia doméstica.
La familia cristiana es una comunión de personas, que reflejan la comunión que existe en Dios entre el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.
Así como Dios es creador, la familia comparte con Él esa obra, al procrear y educar a los hijos. ¡Qué gran dignidad tiene la familia que se asemeja a Dios en su obra creadora!
La familia cristiana, como Jesús, que cuando vino al mundo se dedicó a llevar la palabra de su Padre a todos los hombres, así, la familia tiene la misión de seguir sus pasos, de evangelizar; primero que nada, a sus propios hijos y a todos cuantos le rodean. La familia cristiana también es misionera, pues querrá que otras personas también conozcan a Dios, y serán testimonio del amor de Dios por todos.
También, la familia cristiana esta llamada a la oración. A orar juntos a Dios, quien ha creado a la familia. Así, una familia que reza unida, permanecerá unida, pues juntos, los miembros de la familia se ayudarán mutuamente a vivir como auténticos cristianos.
Cuando Dios habita en una familia, la felicidad abunda en todos sus miembros.

 
 
1. Lee el tema y realiza un dibujo de tu propia creatividad, donde se explique el significado de una VERDADERA FAMILIA CRISTIANA.
2. ¿Cómo explicarías con tus palabras, los cuatro aspectos que suponen seguir a Jesús?
3. Lee atentamente la parte donde dice: SER CRISTIANO, NO ES SIMPLEMENTE... y luego escribe un comentario en el blogs.
 
No te olvides de poner al inicio de la hoja los siguientes datos:
 
 

 

 
 

10 comentarios:

  1. LOLA YANETH APAZA PALACIOS 5-A24 de septiembre de 2015, 1:52 p.m.

    Bueno en esta parte nos trata de decir que ser cristiano no siempre es hacer lo bueno , evitar lo malo , estar bautizado , ir al templo cada día, no porque yo no estoy bautizada, no voy al templo, etc ; pero si creo en Dios y también se que para tener una buena calidad de vida debemos de realizar las buenas cosas que dice en la biblia para nuestro propio bien .En conclusión el cristiano es aquella persona que tiene fe y confianza en Dios y en lo que hace.

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  2. Ser cristiano no es simplemente tener buenos hábitos o costumbres, o pertenecer a una religión que dice creer en Dios, o resignarse a lo que nos pasa sino por el contrario superar nuestras dificultades con fe en Jesús y también hacer que las personas tengan o recuperen su fe en Cristo.

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  3. bueno como bien lo dice el ser cristiano no es siempre lo que puede o tiene que ser,como por ejemplo no va estar encargado siempre de hacer el bien ...porque eso ya depende de cada uno .como tambien depende de cada cristiano lo que vaya o que quiera y tenga que hacer ,creo que todo esta en nosotros.

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  4. Ser un verdadero cristiano no es parecerlo ante la sociedad, un verdadero cristiano es quien se lo demuestra Dios, con sus actos y sobre todo su interior, ser un verdadero cristiano es continuar la obra que Jesucristo comenzó hace tantos años; ser un verdadero cristiano en conclusión es simplemente serlo con el corazón, de compromiso, acciones, pensamientos, es imitar la obra de Jesús y jamás se podría llamar cristiano a aquel hipócrita que piensa en Dios como "algo", como un ascensor a algunas cosas.

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  5. ser cristiano no es ser simplemente creyente en dios sino mas que eso es como (DAR LA VIDA POR DIOS).

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  6. el ser cristiano no es tan solo creer en dios sino para mi seria demostrándolo de una manera.osea dando a conocer la palabra de dios,,y compartirlo con los demás dándoles a conocer.

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  7. Para mi ser cristiano es el que da conocer a los demás acerca de Dios..y no se lo queda para el mismo y daría cualquier cosa por la fe que tiene a Dios.

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  8. Leidy Yoshelin Ticahuanca1 de octubre de 2015, 9:22 p.m.

    Ser cristiano es el cambio de uno mismo, es ver mas allá de nosotros, fijarnos en las cosas que si son importantes mas no en lo material. Es tener fe en Dios, ya que él esta aquí con nosotros y mostrar que su obra es nuestra tarea como cristianos y mas difundirla.

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    1. Me gustó especialmente este fragmento:"Ser cristiano es el cambio de uno mismo, es ver mas allá de nosotros..." Dios guíe tus pasos.

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