martes, 15 de septiembre de 2015

TEMA N° 6: DESAFIOS ACTUALES - "La Globalización, el secularismo y el agnosticismo"

Mundo Globalizado
 
“…. apagaron la furia de las llamas y escaparon del filo de la espada; sacaron fuerzas de flaqueza; se mostraron valientes en la guerra y pusieron en fuga a ejércitos extranjeros.”                                                  
(Hcho 17, 32 )


Preámbulo
 

DESAFIOS ACTUALES

En nuestra vida se presentan constantemente problemas y desafíos que, cual poderosos gigantes, parecen invencibles. Quizá el Goliat en tu vida venga en forma de un endeudamiento, la muerte de un ser querido, la noticia de alguna enfermedad grave, una relación rota o la traición de un amigo. Saber cómo responder a estos problemas gigantescos es de importancia para nuestro crecimiento espiritual. Dios no quiere que nos hundamos en la duda y la preocupación.
Enfrentar Problemas
            El Señor tiene un plan para desarrollar nuestra fe. Por eso a menudo nos permite afrontar la adversidad y desafíos de todo tipo. Dios "estira" nuestra fe y profundiza nuestra dependencia de él. Satanás, en cambio, procura hacernos sentir derrotados y desalentados. Trabaja en nuestras emociones tratando de hacernos creer que no somos dignos del amor y el afecto de Dios. Sin embargo, Satanás no puede derrotar el amor de Dios. El Señor no nos ama por lo que hacemos, sino por lo que su Hijo hizo por nosotros en la cruz del Calvario. No hay nada que podamos hacer para ser dignos del amor incondicional de Dios. Simplemente está ahí para que lo tomemos.
            ¿Enfrentas un inmenso problema hoy? Cualquiera que sea, haz lo que hizo David: Echa mano de la gran verdad de que Dios te ama con amor constante, te salgan las cosas bien o menos bien. Él no permitirá que experimentes la derrota. Pueda ser que pases momentos de fracaso y que la vida no siempre sea como la planeaste, pero al final Dios será glorificado y tú serás bendecido. 

LA GLOBALIZACIÓN
¿Qué es la Globalización?
            La globalización es un proceso de interacción e integración entre la gente, las empresas y los gobiernos de diferentes naciones. Es un proceso en función del comercio y la inversión en el ámbito internacional, el cual cuenta con el respaldo de las tecnologías de información. Este proceso produce efectos en el medio ambiente, la cultura, los sistemas políticos, el desarrollo y la prosperidad económica, al igual que en el bienestar físico de los seres humanos que conforman las sociedades de todo el mundo.
            En la actualidad, la globalización ha adquirido un gran impulso debido a las políticas que han abierto las economías internas e internacionales. Durante los años de la Segunda Guerra Mundial, y especialmente durante las últimas dos décadas, muchos gobiernos han adoptado sistemas económicos de libre mercado, lo cual ha aumentado ampliamente su propio potencial productivo y creado una miríada (multitud) de nuevas oportunidades para el comercio y la inversión en el plano internacional. Los gobiernos también han negociado dramáticas reducciones de las barreras comerciales y han suscrito acuerdos internacionales para promover el comercio de bienes, servicios e inversión.
            La tecnología ha sido el otro aspecto fundamental que ha impulsado la globalización. Los avances alcanzados especialmente en el campo de las tecnologías de información han transformado considerablemente la actividad económica.
            No obstante, la globalización es muy controversial. Sus partidarios sostienen que la misma permite a los países pobres y sus ciudadanos desarrollarse económicamente y mejorar sus niveles de vida. Por su parte, sus oponentes arguyen que el establecimiento de un mercado libre internacional sin restricciones ha beneficiado a las corporaciones multinacionales del mundo occidental, a expensas de las empresas y las culturas locales, y de la gente común. Por lo tanto, la resistencia ante la globalización ha cobrado vida tanto a nivel popular como en el ámbito gubernamental, a medida que la gente y los gobiernos intentan controlar el movimiento de capital, trabajo, bienes e ideas que constituyen la ola actual de globalización.

EL SECULARISMO
¿Qué es el Secularismo?           
            El secularismo se define como el hacerse   profano (frente a lo sagrado) e implica la separación de la religión con respecto a la política, también puede tomarse como la separación que se hace de Estado e Iglesia. Sin embargo, no es más que una forma de pensar y de percibir el mundo, porque realmente no hay nada establecido, es decir, un día pueden creer algo, pero al próximo ya van a hacer algo diferente. Esto puede conllevar a terribles resultados, que podemos evidenciar hoy.
Secularismo en la actualidad:
            El secularismo sostiene que una sociedad religiosa significa una sociedad que posee personas religiosas, no una sociedad que posee instituciones, organismos, obligaciones y prácticas religiosas determinadas. En realidad desde una perspectiva histórica se advierte que los secularistas guardan un resentimiento y un rencor con respecto a la religión que va desde el abandono de lo religioso hasta su marginación. Hoy este enfrentamiento con la religión y lo religioso tiene el nombre de secularismo en nuestra sociedad y en gran parte del mundo.
Conclusión:
            El secularismo como tal no es una religión, con el paso del tiempo se ha degradado
No olvides
su real significado, empezó como una “ideología política” y  ahora puede ser una religión, o para muchos, incluyéndome, es una forma de pensar y asimismo un estilo de vida, esta ideología realmente tiene su trasfondo, tiene su verdadero significado, y a usted, mi estimado lector, se le dio la capacidad de elegir lo que usted desea para usted, yo ya elegí, y he tratado de mostrar de una forma muy resumida lo que pienso y/o opino de esta, si se le puede llamar a si, “religión”, que consiste en: vivir el hoy sin importar las consecuencias del mañana, hacer lo que desees sin importar el buen uso del libre albedrío que nos dio Dios, vivir en algo realmente relativo, y vivir en algo que tiene su significado original realmente distorsionado.



EL AGNOSTICISMO
¿Qué es el Agnosticismo?
            El agnosticismo es la creencia de que es imposible conocer o probar la existencia de Dios. La palabra “agnóstico” significa esencialmente “sin conocimiento”. El agnosticismo es una postura más intelectualmente honesta que la del ateísmo. El ateísmo declara que Dios no existe – una posición improbable. El agnosticismo declara que la existencia de Dios no puede ser probada o negada – que es imposible conocer si Dios existe. En este concepto, el agnosticismo está en lo correcto. La existencia de Dios no puede ser empíricamente probada o negada.
            El agnosticismo está esencialmente indispuesto a hacer decisiones a favor o en contra de la existencia de Dios. Es la última posición de “nadar entre dos aguas”. Los teístas creen que Dios existe. Los ateos creen que Dios no existe. Los agnósticos creen que no debemos ni creer ni negar la existencia de Dios – porque es imposible probar una u otra cosa.
            Por el bien del argumento, deshagámonos por un momento de las claras e innegables evidencias de la existencia de Dios. Si ponemos las posturas del teísmo y el ateísmo a la par del agnosticismo, al cual tiene más “sentido” creer – considerando la posibilidad de la vida después de la muerte. Si Dios no existe, los teístas, ateos y agnósticos por igual, simplemente dejan de existir cuando mueren. Si Dios existe, los ateos y agnósticos tendrán a Alguien a quien responder cuando ellos mueran. Desde esta perspectiva, definitivamente tiene más “sentido” ser un teísta que un ateo o agnóstico. Si ninguna de estas posiciones puede ser probada o desaprobada, ¿no parece más sabio hacer cualquier esfuerzo para creer en la postura que puede tener un eterno e infinito resultado más deseable?
            Es normal tener dudas. Hay tantas cosas en este mundo que no podemos entender. Con frecuencia la gente duda de la existencia de Dios porque no entienden o están de acuerdo con las cosas que Él hace o permite. Sin embargo, nosotros, como criaturas humanas finitas, no debemos esperar que estemos capacitados para comprender a un Dios infinito.


Jesús y la Juventud

LECTURA DE REFLEXIÓN
 
SEGUIR ADELANTE...
Tal vez todo lo que hoy nos preocupa y nos parece difícil e incierto con el tiempo se minimiza y nos damos cuenta que nos ayudó a crecer y a ser mejores cada día…
Momentos de prosperidad…otros de incertidumbre y preocupación…
De pronto cuando creemos tener todo en la vida alguien o algo derrumba nuestro castillo, nuestro imperio… y allí estamos nosotros…
A veces llenos de miedo, otras a la espera de que todo sea una pesadilla y tarde o temprano despertemos…
Pero nunca debemos perder la esperanza…
De pronto al mirar alrededor siempre tenemos algo que nos dice que podemos resurgir…
De todo debemos aprender… Aun cuando nos encontremos mirando con temor nuestro futuro, llenemos nuestro corazón y nuestra vida con un fuerte deseo de seguir…
Que nada ni nadie nos desaliente…
Somos nosotros los únicos que podemos elegir: Bajar los brazos o seguir peleando.
La vida no es fácil a veces…
Pasamos por pruebas difíciles, pero siempre debe existir en cada uno de nosotros la fuerza necesaria que nos permita levantarnos y seguir caminando…

IGLESIA JOVEN (canción)

Somos como un torrente / que recién se está formando,
y mañana a más tardar, / arrasará con todo

Nos estamos preparando / para redimir al mundo,
y ese hombre que esta esclavo de si / que forma la sociedad.

 Somos iglesia joven / tratamos de  transformar el mundo entero
en una sociedad limpia y justa, / donde no exista la esclavitud.

No nos detendrá nada ni nadie / seremos los que rompan las cadenas,
las cadenas que atan, / a este mundo sin amor.

 Sera una guerra sin armas / pero si de muchos cambios,
al que el hombre tendrá que enfrentar / con solo su conversión.

Entonces será otra / la sociedad ideal.
La que Cristo quiso en la tierra, / y predico al mundo.
 
 
 
 
1. Da con tus propias palabras un pequeño concepto de:
    a) Globalización
    b) Secularismo
    c) Agnosticismo
2. Responde brevemente: ¿Porqué se les considerará a estos temas como Desafíos Actuales?
3. Escucha o lee la canción y escribe: ¿Cómo relacionarías esta canción con tu vida personal, ahora que ya estas a vísperas de retirarte del colegio?
 
No te olvides de lo siguiente:
 
 
 
PUEDES PRESENTAR TODOS TUS TRABAJOS HASTA EL DÍA DOMINGO 27 DE SETIEMBRE, EN EL TEMPLO, DESPUÉS DE LA MISA DE LAS 7:30 AM. sin hacer desorden.
 
 


jueves, 10 de septiembre de 2015

Tema N° 5: "SER CRISTIANO EN EL MUNDO ACTUAL Y EN LA FAMILIA"


 
"Le anunciaron la Palabra del Señor a él y a todos los de su casa"
                                                            (Hcho 17, 32 )
 
PREAMBULO
 

¿QUIÉN ES EL VERDADERO CRISTIANO?


Jesús enseñando
Un verdadero Cristiano es una persona que ha puesto su fe y confianza en la persona de Jesucristo, que reconoce que Él murió en la cruz como pago por todos los pecados personales de cada uno de nosotros y que resucitó al tercer día para obtener la victoria sobre la muerte, para dar la vida eterna a todos los que creamos en Él.
            Un verdadero cristiano es en verdad un hijo de Dios, una parte de la verdadera familia de Dios, y uno a quien le ha sido dado una nueva vida en Cristo. Por lo tanto Dios pone un deseo en el corazón del cristiano de cambiar totalmente su estilo de vida y le incentiva a llevar una vida santa y pura. La marca de un cristiano verdadero es demostrar amor hacia los demás y la obediencia a la Palabra de Dios.
            Además el cristiano, como cualquier ser humano, ha de estar dispuesto a conocer y cumplir los mandamientos de la Ley de Dios y de la Iglesia.  
            Por otro lado, un cristiano debe conocer, celebrar y recibir los sacramentos que alimenta, fortalece y purifica la vida de fe.
            Finalmente, el cristiano debe orar. Hablar con Dios, tratarlo nos hace más sus amigos. El Señor ya lo había dicho: ustedes son mis amigos. El que ora con Dios está protegido y el demonio con sus tentaciones no podrán prevalecer.
 
SER CRISTIANO EN EL MUNDO ACTUAL


Importancia de la oración
¿Qué significa seguir a Cristo, hoy? Se trata de un cambio interior de la existencia. Exige que ya no me cierre en mi yo, considerando mi autorrealización como la razón principal de mi vida... Se trata de la decisión fundamental de dejar de considerar la utilidad, la ganancia, la carrera y el éxito como el objetivo último de mi vida, para reconocer sin embargo como criterios auténticos la verdad y el amor. Se trata de optar entre vivir sólo para mí o entregarme a lo más grande. Hay que tener en cuenta que verdad y amor no son valores abstractos; en Jesucristo se han convertido en una Persona. Al seguirle a Él, me pongo al servicio de la verdad y del amor. Al perderme, vuelvo a encontrarme.
            Desde un punto más 'estricto' un cristiano es alguien que ha nacido de nuevo (nacido del Espíritu Santo) y que es un hijo de Dios. Es miembro de la familia de Dios. Es miembro del cuerpo de Cristo, la Iglesia, dentro de la cual ha sido bautizado por el Espíritu Santo. Es y desea ser miembro activo de una congregación local donde funciona junto con otros cristianos para el fortalecimiento y la edificación del cuerpo de Cristo.
Ser cristiano no es simplemente…
  • Hacer el bien y evitar el mal. Hay muchas personas honestas, que trabajan por construir un mundo mejor e intentan luchar contra la corrupción y la injusticia. Les mueven motivos nobles y una ética humanística. Sin embargo, a pesar de sus aportes positivos y sus valores humanos, no por esto pueden ser llamados propiamente cristianos.
  • Creer en Dios. Judíos y mahometanos, budistas e hindúes, y miembros de otras grandes religiones de la humanidad, creen en Dios, origen y fin último de todo, pero no creen en Jesucristo. Por más que sus vidas y esfuerzos estén bajo el amor providente de Dios y la fuerza de su Espíritu, no pueden ser llamados cristianos.
  • Cumplir unos ritos determinados. Toda religión posee ceremonias y ritos simbólicos, pues de lo contrario se convertiría en un mero intelectualismo ético para minorías. Pero no basta haber sido bautizado, haber hecho la primera comunión, asistir a procesiones, peregrinar a santuarios marianos, celebrar festividades para poder ser identificado como cristiano. Los fariseos del tiempo de Jesús eran muy fieles en sus ritos y sin embargo Jesús los denunció cómo hipócritas. El rito es necesario, pero no suficiente para ser cristiano.
  • No se limita a aceptar unas verdades de fe, en unos dogmas, recitar el Credo o saberse el catecismo de memoria. Muchos que profesan la doctrina cristiana recta, están en la práctica muy lejos del Evangelio. Es necesario aceptar la fe de la Iglesia, conocer sus leyes y preceptos, pero esto no basta para ser cristiano. El cristianismo no es sólo una doctrina.
  • No se identifica con seguir una tradición, que se mantiene de siglos a través de un ambiente. Toda religión reconoce la importancia del peso de la historia, pero el cristianismo no es simplemente una cultura, un folklore, un arte, una costumbre inmemorial que se transmite a través de los años.
  • No puede consistir únicamente en prepararse para la otra vida, esperar en el más allá, mientras uno se desinteresa de las cosas del presente o se limita a sufrirlas con resignación. La fe cristiana afirma la existencia de una vida eterna y la consumación de la tierra pero la esperanza de una tierra nueva no debe amortiguar la preocupación por transformar y cambiar esta historia. Por esto no se puede llamar cristiano a quien se inhibe de las preocupaciones históricas, con la excusa del cielo futuro.
  • No se identifica con ninguna de estas posturas u otras semejantes. Algunas son previas al cristianismo (hacer el bien, creer en Dios), otras admiten elementos necesarios pero no suficientes (practicar ritos, aceptar verdades), otras son mutilaciones del cristianismo (reducirlo a una tradición o a la espera de los bienes eternos). Seguramente la contradicción del cristianismo de América Latina nace de que muchos cristianos se identifican con algunas de estas formas inadecuadas de cristianismo. El resurgir de la Iglesia latinoamericana está ligado a una visión más auténtica del ser cristiano.  
¡SER CRISTIANO ES SEGUIR A JESUS!
            No se puede ser cristiano al margen de la figura histórica de Jesús de Nazaret, que murió y resucitó por nosotros y Dios Padre le hizo Señor y Cristo (Hch 2,36). Lo cristiano no es simplemente una doctrina, una ética, un rito o una tradición religiosa, sino que cristiano es todo lo que dice relación con la persona de Jesucristo. Sin él no hay cristianismo. Lo cristiano es El mismo. Los cristianos son seguidores de Jesús, sus discípulos. En Antioquía, por primera vez los discípulos de Jesús fueron llamados cristianos (Hch 11,26).
            La vida cristiana es un camino (Hch 9,2), el camino de seguimiento de Jesús. Los Apóstoles, primeros seguidores de Jesús, son el modelo de la vida cristiana. Ser cristiano es imitar a los Apóstoles en el seguimiento de Jesús. De los Apóstoles se dice que siguieron a Jesús. (Lc 5,11) y a este seguimiento es llamado todo bautizado en la Iglesia. Los Apóstoles no fueron únicamente los discípulos fieles del Maestro, que aprendieron sus enseñanzas, como los jóvenes de hoy aprenden de sus profesores. Ser discípulo de Jesús comportaba para los Apóstoles estar con él, entrar en su comunidad, participar de su misión y de su mismo destino (Mc 3,13-14; 10, 38-39). Seguir a Jesús hoy no significa imitar mecánicamente sus gestos, sino continuar su camino "pro-seguir su obra, per-seguir su causa, con-seguir su plenitud" (L. Boff). El cristiano es el que ha escuchado, como los discípulos de Jesús, su voz que le dice: "Sígueme" (Jn 1,39-44; 21,22) y se pone en camino para seguirle.

¿Qué supone seguir a Jesús, entonces...?

Seguir a Jesús supone reconocerlo como Señor.
            Nadie sigue a alguien sin motivos. El cristiano no sigue, pues a cualquiera, sino al Señor de quien parte la iniciativa para que le sigamos. El es quien siempre llama y nos dice a cada uno de nosotros "Sígueme". El llamado viene de El, a través de la Escritura, de la Iglesia o de los acontecimientos de la historia. Ante esta vocación el cristiano exclama como Pedro: ¿"Señor a quién iríamos"? Tú tienes palabras de vida eterna. Nosotros creemos y sabemos que tú eres el Santo Dios " (Jn 6,68).
            La fe cristiana no consiste propiamente en aceptar doctrinas, sino en reconocer a Jesús como Señor y seguirle.

Seguir a Jesús significa aceptar su proyecto
            Jesús tiene un proyecto, una misión: anunciar y realizar el Reino de Dios (Mc 1,15). Este es el plan que el Padre le ha encomendado, formar una gran familia de hijos y hermanos, un hogar, una humanidad nueva, los nuevos cielos y la nueva tierra que los profetas habían predicho (Is 65, 17-25).
            El Reino del Padre, el cumplimiento de su voluntad, un mundo donde haya pan y perdón, liberado de todo mal y victorioso de toda tentación.
Seguir a Jesús es formar parte de su comunidad
            Jesús aunque llamó a los discípulos personalmente, uno por uno, a su seguimiento, formó con ellos un grupo, los doce, a los que luego se añadieron hombres y mujeres hasta constituir una comunidad: la comunidad de Jesús (Lc 8,1-3). Este modo de actuar del Señor no es casual, sino que corresponde al plan de Dios de formar un pueblo, a lo largo de la historia, para que fuese semilla y fermento del Reino de Dios.
Seguir a Jesús es vivir bajo la fuerza del Espíritu
            Seguir a Jesús, formar parte de su comunidad, continuar su proyecto en la historia de hoy, son realidades que nos superan. Por esto Jesús prometió el Espíritu a sus discípulos (Jn 14, l7) y este Espíritu es la fuerza y el aliento vital que anima, vivifica, guía, santifica, enriquece y lleva a su plenitud la comunidad de los seguidores de Jesús.
 
Podríamos resumir todo lo dicho sobre el seguimiento de Jesús en estos diez mandamientos del Dios de la Vida:
1. Creerás que Dios es el Dios de la Vida, que desea la vida en abundancia para todos y no la muerte.
2. No utilizarás el nombre del Dios de la Vida, para atentar contra la vida de nadie.
3. Agradecerás a Dios la vida y la celebrarás como un gran don y una tarea.
4. Defenderás la vida amenazada y honrarás a los que te han dado vida.
5. No matarás de ningún modo la vida, pues la vida es de Dios.
6. Amarás y gozarás la vida sin egoísmos.
7. No te apropiarás de los bienes que han sido creados para que todos vivan.
8. Compartirás la vida con tu pueblo con toda verdad.
9. Trabajarás para que todos tengan lo suficiente para vivir.
10. Pondrás tu vida al servicio de los demás, hasta arriesgar tu vida por la vida de los otros.
Estos diez mandamientos se resumen en dos: Amarás tu vida y la vida de tu pueblo como vida de Dios.
 
EL CRISTIANO Y LA FAMILIA
 
La familia cristiana
La familia, es una comunidad de fe, esperanza y caridad. Por eso le podemos llamar Iglesia doméstica.
La familia cristiana es una comunión de personas, que reflejan la comunión que existe en Dios entre el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.
Así como Dios es creador, la familia comparte con Él esa obra, al procrear y educar a los hijos. ¡Qué gran dignidad tiene la familia que se asemeja a Dios en su obra creadora!
La familia cristiana, como Jesús, que cuando vino al mundo se dedicó a llevar la palabra de su Padre a todos los hombres, así, la familia tiene la misión de seguir sus pasos, de evangelizar; primero que nada, a sus propios hijos y a todos cuantos le rodean. La familia cristiana también es misionera, pues querrá que otras personas también conozcan a Dios, y serán testimonio del amor de Dios por todos.
También, la familia cristiana esta llamada a la oración. A orar juntos a Dios, quien ha creado a la familia. Así, una familia que reza unida, permanecerá unida, pues juntos, los miembros de la familia se ayudarán mutuamente a vivir como auténticos cristianos.
Cuando Dios habita en una familia, la felicidad abunda en todos sus miembros.

 
 
1. Lee el tema y realiza un dibujo de tu propia creatividad, donde se explique el significado de una VERDADERA FAMILIA CRISTIANA.
2. ¿Cómo explicarías con tus palabras, los cuatro aspectos que suponen seguir a Jesús?
3. Lee atentamente la parte donde dice: SER CRISTIANO, NO ES SIMPLEMENTE... y luego escribe un comentario en el blogs.
 
No te olvides de poner al inicio de la hoja los siguientes datos:
 
 

 

 
 

miércoles, 2 de septiembre de 2015

Tema N° 4: "TEMAS PRINCIPALES DE LA DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA"


 
INTRODUCCIÓN
El objetivo principal de la Doctrina Social de la Iglesia es interpretar las realidades terrenas, examinando su conformidad o diferencia con lo que el Evangelio enseña acerca del hombre y de su vocación terrena y, a la vez, trascendente, para ORIENTAR en consecuencia la conducta cristiana.
            Como se indicó en el fascículo anterior, la meta final de la Doctrina Social es la salvación de las almas. Pero el fin inmediato de la es proponer principios y valores que contribuyan a crear una sociedad digna del hombre, aplicando las enseñanzas de Jesucristo.
            En esa perspectiva, la Doctrina Social se desarrolla en una triple dimensión:
 

A.   DIMESIÓN TEÓRICA.– porque el Magisterio de la Iglesia ha formulado explícitamente en sus documentos sociales una reflexión orgánica y sistemática. El Magisterio señala el camino seguro para construir las relaciones de convivencia en un orden social según criterios universales que puedan ser aceptados por todos.
B.   DIMENSIÓN HISTÓRICA.– la Doctrina se desarrolla dentro de una dimensión histórica, dado que en ella el uso de los principios está encuadrado en una visión real de la sociedad, e inspirado en la toma de conciencia de sus problemas en un marco histórico determinado.
C.   DIMESIÓN PRÁCTICA.– porque la Doctrina Social no se queda en el enunciado de los principios permanentes de reflexión (visión teoría)  ni en la interpretación de las condiciones históricas de la sociedad (visión histórica), sino que PROPONE también la aplicación efectiva de estos principios en la praxis (visión práctica) traduciéndolos concretamente en la forma y en la medida que las circunstancias permiten y reclaman.
Bajo esta perspectiva los campos o temas principales de la DSI son: la persona humana, la familia, el orden social, el papel del Estado, la economía, el trabajo y salarios, pobreza y caridad, el ambiente natural y la comunidad internacional.
            Trataremos de explicar este vasto campo de la DSI, de manera muy resumida y que facilite una visión general de las competencias donde el Magisterio de la Iglesia tiene algo que decir para orientar a los cristianos y a todos los hombres y mujeres de buena voluntad, en el campo social. Veamos:
1. La Persona Humana
            Según la Doctrina Social de la Iglesia, la persona humana, por estar hecha a imagen y semejanza de Dios, posee una dignidad que la hace superior a los demás seres creados.
            La justicia social sólo puede obtenerse respetando la dignidad trascendente del hombre. Pero éste no es el único ni el principal motivo. Lo que está en juego es la dignidad de la persona humana, cuya defensa y promoción nos han sido confiadas por el Creador, y de las que son rigurosas y responsablemente deudores los hombres y mujeres en cada coyuntura de la historia.
2. La Familia
            La familia, entendida en sentido amplio, es una realidad social presente en todas las sociedades conocidas, aunque en modalidades y formas distintas. Alrededor de la alianza entre varón y mujer, y la comunidad de vida entre padres e hijos, existen una gran variedad de valores, usos, costumbres, normas y leyes que la configuran no sólo como un grupo social característico, sino como una institución social fundamental.
            La naturaleza del matrimonio y la familia y su misión en la sociedad y en la Iglesia presenta un conjunto de deberes que han de ser asumidos por los diversos miembros de la familia, cada uno según su condición. A estos deberes se corresponden un conjunto de derechos de la familia que deben ser respetados y promovidos en la vida social para que la familia pueda llevar a cabo sus cometidos.
 
3. El Orden Social.– Es necesario un orden social acorde con la dignidad humana donde reine la bondad, la armonía, la libertad, la justicia y la verdad. En resumidas cuentas el orden social debe regirse fundamentalmente con los mandamientos de la ley de Dios. Todas las normas de orden civil (Constitución Política y Leyes) y eclesiásticas (leyes de la iglesia) deben regirse bajo estos parámetros, sino pueden tornarse injustas y con perjuicios muy lamentables para la sociedad.
 
4. El Papel del Estado.- “Una sociedad bien ordenada y fecunda requiere gobernantes, investidos de legítima autoridad, que defiendan las instituciones y consagren, en la medida suficiente, su actividad y sus desvelos al provecho común del país”. Se llama "autoridad" la cualidad en virtud de la cual personas o instituciones dan leyes y órdenes a los hombres y esperan la correspondiente obediencia. Toda comunidad humana necesita una autoridad que la rija. Esta tiene su fundamento en la naturaleza humana. Es necesaria para la unidad de la sociedad. Su misión consiste en asegurar en cuanto sea posible el bien común de la sociedad.
            El Estado de Derecho es la condición necesaria para establecer una verdadera democracia. Para que ésta se pueda desarrollar, se precisa la educación cívica así como la promoción del orden público y de la paz en la convivencia civil. En efecto, "no hay una democracia verdadera y estable sin justicia social. Para esto es necesario que la Iglesia preste mayor atención a la formación de la conciencia, prepare dirigentes sociales para la vida publica en todos los niveles, promueva la educación ética, la observancia de la ley y de los derechos humanos y emplee un mayor esfuerzo en la formación ética de la clase política.

5. La Economía.- "Llenad la tierra y sometedla". La Biblia, desde sus primeras páginas, nos enseña que la creación entera es para el hombre, quien tiene que aplicar su esfuerzo inteligente para valorizarla y, mediante su trabajo, perfeccionarla, por decirlo así poniéndola a su servicio. Si la tierra está hecha para procurar a cada uno los medios de subsistencia y los instrumentos de su progreso, todo hombre tiene el derecho de encontrar en ella lo que necesita.
            La incumbencia del Estado es la de vigilar y encauzar el ejercicio de los derechos humanos en el sector económico; pero en este campo la primera responsabilidad no es del Estado, sino de cada persona y de los diversos grupos y asociaciones en que se articula la sociedad. El Estado no podría asegurar directamente el derecho a un puesto de trabajo de todos los ciudadanos, sin estructurar rígidamente toda la vida económica y sofocar la libre iniciativa de los individuos.
6. Trabajo y salarios.- En nuestro tiempo es cada vez más importante el papel del trabajo humano en cuanto factor productivo de las riquezas inmateriales y materiales; por otra parte, es evidente que el trabajo de un hombre se conecta naturalmente con el de otros hombres. Hoy más que nunca, trabajar es trabajar con otros y trabajar para otros: es hacer algo para alguien. El trabajo es tanto más fecundo y productivo, cuanto el hombre se hace más capaz de conocer las potencialidades productivas de la tierra y ver en profundidad, las necesidades de los otros hombres, para quienes se trabaja.
            El salario justo es el fruto legítimo del trabajo. Negarlo o retenerlo puede constituir una grave injusticia. Para determinar la justa remuneración se han de tener en cuenta a la vez las necesidades y las contribuciones de cada uno. "El trabajo debe ser remunerado de tal modo que se den al hombre posibilidades de que él y los suyos vivan dignamente su vida material, social, cultural y espiritual, teniendo en cuenta la tarea y la productividad de cada uno, así como las condiciones de la empresa y el bien común".

7. Pobreza y caridad.– La pobreza material es uno de los grandes males que todos debemos procurar desterrar. La verdadera caridad cristiana y humana es uno de los medios fundamentales donde se asienta muchas otras virtudes y valores que ayudarán a salir de este mal social en el mundo. La verdadera caridad no es darle el pescado, sino enseñarle a pescar.
8. El Ambiente Natural.- El séptimo mandamiento exige el respeto de la integridad de la creación. Los animales, como las plantas y los seres inanimados, están naturalmente destinados al bien común de la humanidad pasada, presente y futura. El uso de los recursos minerales, vegetales y animales del universo no puede ser separado del respeto a las exigencias morales. El dominio concedido por el Creador al hombre sobre los seres inanimados y los seres vivos no es absoluto; está regulado por el cuidado de la calidad de la vida del prójimo incluyendo la de las generaciones venideras; exige un respeto religioso de la integridad de la creación.
9. La Comunidad Internacional.- Una característica del mundo actual es la tendencia a la globalización, fenómeno que, aun no siendo exclusivamente americano, es más perceptible y tiene mayores repercusiones en América. Se trata de un proceso que se impone debido a la mayor comunicación entre las diversas partes del mundo, llevando prácticamente a la superación de las distancias, con efectos evidentes en campos muy diversos. Desde el punto de vista ético, puede tener una valoración positiva o negativa. En realidad, hay una globalización económica que trae consigo ciertas consecuencias positivas, como el fomento de la eficiencia y el incremento de la producción, y que, con el desarrollo de las relaciones entre los diversos países en lo económico, puede fortalecer el proceso de unidad de los pueblos y realizar mejor el servicio a la familia humana. Sin embargo, si la globalización se rige por las meras leyes del mercado aplicadas según las conveniencias de los poderosos, lleva a consecuencias negativas. Tales son, por ejemplo, la atribución de un valor absoluto a la economía, el desempleo, la disminución y el deterioro de ciertos servicios públicos, la destrucción del ambiente y de la naturaleza, el aumento de las diferencias entre ricos y pobres, y la competencia injusta que coloca a las naciones pobres en una situación de inferioridad cada vez más acentuada.

EN CONCLUSIÓN.-
            Para la Iglesia el mensaje social del Evangelio no debe considerarse como una teoría, sino, por encima de todo, un fundamento y un estímulo para la acción. Impulsados por este mensaje, algunos de los primeros cristianos distribuían sus bienes a los pobres, dando testimonio de que, no obstante las diversas proveniencias sociales, era posible una convivencia pacífica y solidaria. Con la fuerza del Evangelio, en el curso de los siglos, hombres y mujeres de todas las clases sociales, se comprometieron en favor de los necesitados y marginados, convencidos de que las palabras de Cristo: "Cuantas veces hagáis estas cosas a uno de mis hermanos más pequeños, lo habéis hecho a mí" (Mt 25, 40). Hoy más que nunca, la Iglesia es consciente de que su mensaje social se hará creíble por el testimonio de las obras, antes que por su coherencia y lógica interna. De esta conciencia deriva también su opción preferencial por los pobres, la cual nunca es exclusiva ni discriminatoria de otros grupos. Se trata, en efecto, de una opción que no vale solamente para la pobreza material, pues es sabido que, especialmente en la sociedad moderna, se hallan muchas formas de pobreza no sólo económica, sino también cultural y religiosa.
 

1. Escribe un comentario para cada uno de los 9 temas de la Doctrina Social de la Iglesia.
 
No te olvides de escribir al inicio de la hoja el siguiente formato.